Dienstag, 9. Februar 2010

Una Historia Real


Esta Historia real que voy a contar por capítulos transcurre en los dominios, en las praderas y vergeles, bosques y desiertos de Internet. Considero Internet como un paisaje exuberante de ricas especies vegetales y animales. Lo considero una plaza pública virtual, un ágora, en donde se reúnen millones de seres para husmear, para conocer, para investigar, para satisfacerse sexualmente, para no sentirse solos, para delinquir, para ligar, para presumir, para descubrir, para investigar, para hacer que la vida sea más fácil y algo más entretenida, para tener una biblioteca en el salón de la casa, para expresarse, para curarse ciertas enfermedades psiquíatricas, para disfrutar, para expresarse, para dar rienda suelta a sus complejos de escritores, para contar historias (como yo)…para todo lo imaginable.
Internet es un invento (militar) que se reconvirtió en un invento social. Para mi Internet es algo que me sirve y utilizo constantemente para mi divertimento y para mi trabajo, me sirve para casi todo, menos para follar como a mi me gustaría, no para hacerme pajas con alguien a quien no veo ni conozco, aunque reconozco que también lo he hecho y ha satisfecho mi libido y mi necesidad ansiosa de sexo.
Todo esto es Internet y mucho más, hay especialistas que hablan de él mucho mejor que yo y hacen exposiciones concienzudas y muy elaboradas que casi todos nos creemos y felicitamos a sus autores como gurus mediáticos.
 

Y después de todo Internet sirve también para escribir y reflejar inquietudes que antes ni nos atrevíamos y si lo hacíamos teníamos que editarlas en imprentas y recibir el visto bueno del editor de turno, con todo lo que conllevaba de trabajo, tiempo y desesperación. Hasta que a alguien se le ocurrió que se podría editar cualquier escrito que cualquiera quisiera en el invento llamado Internet.. Y ocurrió el milagro de que todos podíamos contar y dar rienda suelta a nuestra alma de escritores frustrados sin mayor esfuerzo que unos simples toques de teclas. Es algo mágico y maravilloso. Es una revolución comparable a cuando Gutemberg invento esa maquinita para copiar hojas escritas.
¿no me digáis que es algo fabuloso y tremendo el que se pueda hacer esto?

 
Yo mismo escribo en Internet, yo mismo lo utilizo de esta curiosa forma. Hace años empecé un blog (palabra que traducida libremente al español significa “bitácora”, definida como el libro en donde el capitán de un barco reseña todo lo que ocurre o transciende a bordo del barco en el que navega). Pues bien, empecé a escribir “mis” historias acerca de una parte muy significativa de mi vida, una parte que me condicionó y aún lo hace. Escribí sobre mi adicción a la Heroína. He de reconocer que ni fue fácil ni fue algo que escribiera sin tener que pagar un impuesto, un peaje duro y de elevado precio. Aclaro y dejo constancia en estas mismas líneas en este mismo momento (ya que no he tenido otro parecido) que ni estoy orgulloso ni me satisface ni me alegra ni consuela mi narcisismo ni me hace puta gracia las estadísticas del blog, lo que significó, las reseñas que de él se hicieron ni el” éxito” si lo tuvo que con él conseguí.
Dicho blog duró cuatro años y por él pasaron más de 250.000 personas y no es broma, tengo un contador que lo dice y lo coloqué cinco meses después de haber empezado a escribir, aún siguen pasando personas, leyéndolo y poniéndome comentarios, aproximadamente unas 3000 por mes, y lleva cerrado más de 3 años.
En él se reflejan muchas de mis maldades, muchos traumas, mucha ignorancia mía, muchas anécdotas, muchas estupideces cometidas, mucho daño causado al prójimo, mucha miseria humana, muchas cabronadas mías y de otros personajes que pululan por sus posts… mucha vida mía, contada sin tapujos y con extrema sinceridad. Porque nunca pensé que tanta gente pudiera leerlo, que algo que yo veía con sincera inocencia pensando que me vendría bien una catarsis escrita para mi loca y destructiva adicción, pudiera llegar a convertirse en un elemento que daría un giro a mi vida, que hiciera tal mella o cicatriz en mi alma y que tuviera tanta repercusión en mis pensamientos y en mi vida posterior.
 
Abrí la espita por donde surgieron fantasmas y seres infra y supramundanos que llenaron las páginas escritas por mi y fueron ocupando el espacio vital que yo quería mantener inocentemente limpio e ingenuo. Seres humanos también igualmente salieron en bandadas por la grieta que ignorantemente abrí al escribir mis vivencias al exterior, al jardín en donde vivían y pacían miles de seres humanos y no humanos que tenían la fácil oportunidad de leer las cosas que yo escribía.
Nadie sabía de la existencia de ese blog, amigos, familiares o conocidos mios, no sabían ni saben aún de la existencia del blog. Y por arte del poder de Internet, por algo mágico que se da en Internet que es por lo que nunca nadie tendrá el poder sobre él y jamás podrá ser controlado por los mismos de siempre esos jodidos muertos de hambre y cultura que se llaman políticos o intelectuales inclusos científicos. Internet es LIBRE, si señores, y lo seguirá siendo. Se dará el milagro de la comunicación entre todo tipo de seres en este mundo desquiciado y lleno de locos de atar.


No solo abrieron mi blog esa cantidad exagerada de persona de todo el mundo sino que más de 400 personas hablaron y se pusieron en contacto conmigo.
¿Es posible semejante panorama? Pues si, ya lo veis.
Aviso para navegantes, puede, como siempre ocurre, que haya ciertos ignorantes más profundos de lo que todos somos en cierta medida que no se crean todo esto y empiecen no solo a dudar entre bambalinas (que sería lo correcto y elegante) sino que lo gritaran a los cuatro vientos elevando la voz de la estupidez para que todos vean las mentiras e inexactitudes que están escritas aquí y ahora.

Pero con eso cuento y con eso hago lo de siempre; lo desprecio profundamente y si no tiene ninguna importancia (y con perdón) para mi todo esto, ni las personas que puedan interesarse, menos aún, claramente, la tienen los enanos mentales y pobres de espíritu que se empeñan en hacer daño a las rocas de granito que encuentran en su camino.


La historia real que voy a contar para entretenimiento mío y de los que quieran leerla sale del mágico mundo de Internet en donde todo es posible y en donde la vida es un remedo de la realidad que algunos llaman “virtual” y que yo pienso que no existe diferente entre la vida fuera y/o dentro de Internet, porque todo es lo mismo y todo ocurre en el contexto de la realidad (engañosa e impermanente) que vivimos los que escribimos y leemos las historias de Internet.

Voy a contar lo que me paso por escribir un blog sobre mi adicción en este mundo “virtual” que llamamos “Internet”.

Fin del primer capítulo.

4 comentarios:

Anonym hat gesagt…

Tres años ya, que rapido ha pasado el tiempo.

Anonym hat gesagt…

El tiempo es algo subjetivo, cuando de joven pasa en un suspiro de viejo parece que nunca termina de pasar.
Tres años no son ni pocos ni muchos, depende de quien lo piense, para mi han pasado en un suspiro, cierto. Y no soy joven precisamente.

Gracias por tú comentario.
Jody

Anonym hat gesagt…

Cierto, antes creia conocerte. comentaba. ahora solo leo. no me des las gracias solo por leerte.

Unknown hat gesagt…

Interesante post. Yo al igual que vos escribí una historia que me sucedió hace mucho tiempo, la cual me gustaria compartir. Espero sea de tu total agrado.
http://lasperrasderabanito.blogspot.com/2013/05/oscarito-una-inocencia-perdida.html