Sonntag, 15. November 2009

Vivir contigo pero sin ti

El mundo de los sentimientos es embriagador y si no andas muy atento parece que vas borracho por la vida. Con lo que eso trae consigo; maledicencia, mentira sobre tu persona, incomprensión de tu carácter, ocultación de la personalidad, equivocación y desorientación.
El mundo de los sentidos es resbaladizo, patinas sobre la realidad y cuando me veo patinando sobre la realidad no sé donde agarrarme, primero porque no me da tiempo de hacerlo y después porque pocos sitios hay donde agarrarse. Si no fuera así, vivir permanentemente en el mundo de los sentidos sería fantástico.
Esas emociones, esos subidotes de adrenalina, ese placer en forma de mejillas coloradas y sofocos, esa sensación continua y permanente si no fuera por lo de patinar sería la esencia de mi vida. Solo emociones producidas por los sentidos.

¡¡Es tan encantador sentir el amor!!

Es un ejemplo, claro, porque también me gusta sentirme colocado y emocionado por algo placentero. El sentido común y la experiencia nos dice que las emociones pueden ser contrarias a todo esto, contrarias al placer, las hay dolorosas. Se sabe que la mente nos protege permitiendo que las dolorosas se olviden antes y duren menos. Aún así y todo siempre he preferido vivir emocionalmente, sentirme emocionado, emplear los sentidos y disfrutar de lo que proporcionan.

Ahora tengo un momento sentimental muy tan atrayente que me confunde pero que me produce un placer tan sutil, cómodo y silencioso que deseo que dure y no termine. Es como una corriente de aire frío en un ambiente caluroso y sofocante, que no quieres que termine y que te sienta a las mil maravillas. Así es, como eso.

El mundo de los sentimientos es tan poderoso que no te deja mentir. Se nota tanto el sentimiento que por mucho que quieras ocultarlo no puedes. Es atrayente el mundo sentimental. Seis sentidos que están a nuestra disposición para conocer mejor esta realidad y que sin embargo nos sirven para alejarnos cada vez más de la auténtica realidad. Por eso es embriagador el mundo de los sentimientos porque nos mete en la espiral que conduce directamente al mundo del engaño, al mundo de no-es-lo-que-parece. Con otras palabras, al mundo contrario a la realidad; al mundo actual, en el que vivo y viven todos los demás. A este mundo cruel y sentimental, el mundo en el que se actúa dirigido por los sentimientos que nacen de los sentidos y que no soy capaz de anular con mi verdadera y real mente.

La mente es un espejo y como tal deben ser reflejados todos los pensamientos, habladurías y actos, tanto de los demás como los propios. Y es así como se descansa y se vive de acuerdo a la realidad. Midiendo las cosas con la auténtica y sincera vara de medir; mi mente-espejo. Todo desaparece, deja de tener “un” sentido. Todo se convierte en abrumadora magia, cuando todo deja de tener sentido, cuando desaparece el sentimiento, todo es magia. No sabemos a qué atenernos y el mundo se transforma en algo desconocido en el que nuestro escudo para defendernos de todo eso es simplemente “Amor” con el Amor no se tiene miedo porque es el arma más poderosa que existe. Con mi pistola de balas de Amor puedo “matar” a todo lo que se me ponga por delante, sea placentero o doloroso.

Cierro el círculo, estoy en un momento embriagador, noto que un soplo de fresco Amor recorre mi ser. Sentimiento, sentido. Lo anulo y queda el simple y único Amor. Eso que se siente cuando alguien se sienta a tu lado y un cosquilleo recorre tu ser.
El mundo de los sentidos es un vivir contigo pero sin ti.

Samstag, 7. November 2009

¡¡Tolerancia cero!!



Creo que se debe hacer todo lo que podamos, incluso molestarnos más de lo normal, en propagar no solo el vídeo sino la moraleja que va implícita en todo esto. ¡Hagámoslo!